LA RADIACIÓN SOLAR: UN RIESGO LABORAL
Un
riesgo laboral existe cuando un trabajador está expuesto en su trabajo a sufrir
una enfermedad o un accidente. Así, entre los riesgos laborales están las
enfermedades profesionales. La radiación solar causa un grave daño en los seres
humanos, símbolo de ello es que está clasificada por parte de IARC como
cancerígena de grupo 1. Por ello afirmamos con rotundidad que la radiación
solar sí es un riesgo laboral.
IARC utiliza cinco clasificaciones para evaluar la solidez de la evidencia
científica, y definir una posible asociación con el cáncer en los seres
humanos. Por cada agente estudiado, un grupo de trabajo de especialistas de la
IARC establece una opinión, por consenso, sobre si las pruebas científicas, de
alguna manera son fuertes, suficientes o limitadas. Asimismo, definen si la
evidencia es suficiente para llegar a una conclusión.
Los rayos ultravioleta (UVA, UVB y UVC) que
componen la radiación solar son el componente con mayor poder energético y pasan
a través de las nubes. La radiación solar UVC la bloquea la capa de ozono pero
los rayos UVA y UVB alcanzan, en distinto grado, la superficie terrestre y
penetran en la piel del ser humano.
La piel es lo que protege al organismo contra agentes químicos, físicos
(radiaciones UV) y biológicos. La piel está formada por 3 capas, la epidermis,
la dermis y la hipodermis. Para defenderse de las radiaciones UV, aumenta el
grosor del estrato córneo de la epidermis y aumenta la producción del pigmento
melanina para evitar daños en el ADN de las células de la piel, y así evitar
tumores.
Principales consecuencias de la radiación ultravioleta:
- Supresión de la inmunidad que puede provocar reacción inmunológica/inflamatoria.
- Fotorejuvenecimiento. Envejecimiento prematuro.
- Fotocarcinogénesis. Cambios en las células de la piel que pueden ocasionar lesiones precancerosas y cáncer. El cáncer en la piel es el más habitual.
Es importante tener en cuenta que el daño sufrido por la piel debido
a la radiación solar perdura en el tiempo, por lo que aconsejamos a los
trabajadores jóvenes que tengan especial cuidado, ya que, la posible
lesión sufrida puede manifestarse muchos años después.
Los
servicios de meteorología miden continuamente la radiación UV del sol y
advierten del peligro que supone en cada momento usando la escala UVI.
- Índice UV 1 y UV 2. No necesita protección.
Puedes permanecer en el exterior sin riesgo - Índice UV 3, UV 4, UV 5, UV 6 y UV 7. Necesitas protección.
Lo mejor es mantenerse a la sombra, siempre que sea posible, durante las horas centrales del día.
Ponerse sombrero, crema de protección solar y sombrero. - Índice UV 8, UV 9, UV 10, UV 11, Necesitas protección extra.
Evita salir durante las horas centrales del día.
Busca siempre que puedas las sombra
Es imprescindible llevar camisa, crema de protección solar y sombrero.
Todos los trabajadores que trabajen al aire libre deben protegerse tan pronto como el índice UV alcanza el nivel 3 sin ser necesario que esté brillando el sol en ese momento.
Los principales trabajos que conllevan a la exposición solar son:
- Agrícolas
- Albañiles, operarios de carreteras.
- Trabajos en el agua, tales como, pescadores, buzos, tripulantes de embarcaciones, socorristas, etc.
- Trabajos en altura, tales como, guardias forestales, monitores de esquí, trabajadores de canteras a cielo abierto, etc.
- Trabajos en zonas urbanas sin posibilidad de áreas sombreadas. Carteros, jardineros, guardias, operadores de parquímetros, etc.
- Profesores de educación física y monitores.
- Conductores de vehículos, puesto que la mayoría de los cristales utilizados en ventanas y ventanillas bloquean los rayos UVB pero no los rayos UVA.
El listado anterior hace referencia a los principales trabajos relacionados con la exposición pero no son los únicos, todos aquellos trabajadores que se vean expuestos deberán utilizar protección.